

TODO SOBRE AUTOS
Conviene o no conviene "planchar" el auto ?
Una gran cuestión que muchos hemos enfrentado quizás de más jóvenes fue si convenÃa hacerle una "planchita" al auto.
Hay diferentes formas y métodos para trabajar la suspensión y de distintos precios pero más allá de la "facha" hay aspectos técnicos que influyen en estas modificaciones.
No es ningún secreto que los autos en Latinoamérica y principalmente en el Mercosur, suelen contar con un despeje al piso superior a sus pares primermundistas. Entiendáse como que son más altos, y también con esquemas de suspensión más mullidos debido al pobre estado de los caminos y rutas locales.
De hecho los autos de los segmentos inferiores, pensados netamente para el tránsito urbano, suelen ser más altos, no sólo de despeje al suelo sino de altura de carrocerÃa en sÃ, y con suspensiones blandas para copiar las irregularidades de las calles de ciudad y direcciones livianas para maniibras de estacionamiento o de alto tránsito.
Esto que en ciudad hace a un auto tan confortable en su marcha, se vuelve un tanto contraproducente a velocidades de ruta y autopista, ya que el mayor despeje lo hace un poco más inestable en la marcha, las suspesiones blandas no ayudan, y una altura de carrocerÃa excesiva lo vuelven un vehÃculo "navegador", como quien dice un "flan".
Mientras se lleve el auto derecho no hay problema, el problema es cuando hay que encarar alguna curva muy cerrada o hay mucho viento cruzado que desvÃa la trayectoria del auto.
Una solución a esto podrÃa ser trabajarle la suspensión al auto, bajándole algunos centÃmetros y/o endureciéndola.
Ningún fabricante recomienda hacer este tipo de reformas a los vehÃculos, pero a veces, ya sea por necesidad o más bien por gusto, es factible hacerlas.
Lo más común es cambiar los espirales por espirales progresivos. Esta reforma acerca al auto unos centÃmetros al piso y hace que se "agarre" más sin perder mucho confort de marcha. No es para nada recomendable cortar los espirales originales para que fueron diseñados para soportar una cierta presión asà que si es por bajar el auto conviene poner espirales nuevos diseñados para ese modelo de coche.
Esta modificación puede tener como parte negativa que se acorte la vida útil de los amortiguadores ya que trabajan con menos recorrido y su posición más estirada ahora está acotada.
Otra reforma que puede ayudar a la estabilidad y tenida direccional del auto es la colocación de una barra de torsión en los anclajes de la suspensión delantera. Esto Hará que el chásis no torsione tanto en las curvas y por ente el auto se inclinará menos hacia la parte externa del viraje. Se conseguirá asà un mejor balance entre la suspensión derecha e izquierda delanteras.
Sin embargo esto tiene una desventaja. Colocar una barra entre ambas suspensiones les quita independencia y por ende todo el eje se sentirá un poco más áspero en caminos irregulares. Lo mismo sucede si se coloca (o refuerza) una barra estabilizadora o antirrolido en la suspensión trasera. Se gana en tenida, pero se pierde cierto confort.
Otra modificación puede ser colocar llantas y cubiertas más grandes y de talón mas chico. Se mejora el agarre del auto contra el suelo, pero com contrapartida puede aumentarse el error en el tablero con el velocÃmetro y el cuentakilómetros y también se pierte confort ya que las gomas de talón alto también absorven irregularidades del terreno.
Todas estas modificaciones se podrÃan realizar en un auto de mayor gama que no traiga todo esto de serie, pero como no todos tenemos autos del segmento C, alguna modificación puede ayudar.
Mas allá de cualquier modificación algo que siempre ayuda y que a esta altura deberÃa traer todos los autos, es el control de estabilidad ESP. Con este sistema casi no se hace necesaria ninguna modificación más que para responder a cuestiones de sensaciones de manejo.

